– DR. PABLO AISENBERG – M.P.229328/M.N.122139

Dr. Pablo Aisenberg

• Doctor, muchas personas suponen que la presbicia es una enfermedad…

No es así. Se trata de una alteración que tiene que ver con el tiempo. Después de los 40 años, inevitablemente, todos empezamos a tener disminución       de la función de un músculo encargado de mover una lente que enfoca todas las imágenes que queramos ver. Al fallar ese músculo, el enfoque falla        también y nosotros vemos borroso.

• ¿Hay personas más predispuestas que otras a la presbicia?

Hasta ahora no tenemos detectadas personas a las que, antes de los 40, les empiece a faltar el neurotransmisor. El grado de presbicia sí puede ser superior para algunos pacientes frente a otros. Es que el músculo tiene una capacidad de receptores para esos neurotransmisores.

«Quienes tienen suerte y cuentan con muchos transmisores los pueden captar mejor y, entonces, ven bien hasta más tarde. Por lo tanto, no necesitan anteojos o el tratamiento hasta los 50. Otros, a los 40 no tienen alternativa alguna. Como en todas las cosas, los seres humanos tenemos algunas diferencias».

• ¿La presbicia diferencia hombres de mujeres?

No, la diferencia es que el hombre calla y la mujer habla y lo dice.

• Pero la presbicia también se puede operar…

Sí. Hay muchas técnicas, pero si entendemos que depende de la función del músculo ciliar, en mi opinión, la cirugía de presbicia tiene un historia corta. Después de practicada, pronto se vuelve a necesitar el aumento o alguna corrección. Y, así, el paciente sigue arruinando su músculo ciliar. La cirugía corrige parcialmente el problema y el tratamiento con gotas.
«De todas formas, es probable que el individuo, en algunos años, necesite de una cirugía. En la práctica, son dos métodos complementarios que finalmente terminaremos usando».

• ¿La edad puede poner un freno?

Atacamos la presbicia que se da entre los 40 y 65 años y, salvo excepción, no tratamos más allá de los 65 años. Simplemente, porque la rigidez del cristalino empieza a jugar un rol muy importante. Este tratamiento no tiene pacientes a los que no le va bien, porque cuando advertimos que no pueden avanzar, no continuamos.

• ¿En que medida puede llegar a afectar la lectura permanente o el uso intensivo de la visión?

En principio, no sería ningún factor preponderante. Hoy sabemos que quien más usa el músculo, mejor le va y le va peor a quien menos lo usa. Sabemos que quien usó anteojos durante más tiempo, está peor que quien los usó menor tiempo. Lo cierto es que todavía no podemos saber con certeza qué es lo que pasa.

Para consultar por Tratamiento para la presbicia, haga CLIC AQUÍ.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.
Tienes que aprobar los términos para continuar